Ya no queda tiempo, días, quizá horas. Ahora estamos en los detalles tontos que son tan importantes… taburetes para tocar encima, sentados, acústicos, pies de guitarra y algo de atrezzo para el escenario.
No habrá Alcohol en camerinos, nos está costando sacarle botellas de agua al Ayuntamiento, pero lo haremos, y lo haremos bien. Me da tanta seguridad estar rodeado de tanto arte, de tanto nivel que no tengo ningún tipo de miedo ni a los duetos, ni a los coros…
Solo espero que la gente responda y que esta aventura llegue a buen puerto, en el fondo lo que queremos todos es que el peso artístico de este concierto nos una a nivel personal para poder hacerlo más veces en el futuro.
Voces de Ciudad triunfó como idea en su día y creo que hoy también podrá hacerlo.
En el fondo es sólo música en manos de los músicos y eso tiene que salir bien por cojones.